El concejal de Seguridad Ciudadana, Blas Raimundo, afirmó ayer que la policía local sí vigila el barrio de Río Jerte, en contra de lo que aseguran los vecinos, que precisamente han pedido más vigilancia policial, preocupados por la continua presencia y paso de toxicómanos para buscar droga a San Lázaro.

Los vecinos se quejan de que la Policía Nacional pasa, pero no para, mientras a la local no la ven por el barrio, pero el edil insistió en que "estamos vigilando, los agentes se paran muchas veces en la rotonda de San Miguel, junto a la farmacia". Además, puso como ejemplo que hace un mes y medio la policía local "cogió a una chica que se estaba pinchando debajo del puente", una de las zonas donde se refugian los toxicómanos.

Pero lo cierto es que los vecinos siguen viendo a éstos a diario pasar y drogarse en el parque infantil del barrio, e incluso uno lo hizo hace poco en la sede vecinal. Además, la asociación de vecinos ha alertado de las condiciones infrahumanas en las que viven, por la humedad del río o las casas ruinosas que también utilizan de refugio.