Abren las bolsas y dejan la basura esparcida por las calles. Hasta el punto de que los vecinos creían que era obra de perros vagabundos, pero ha resultado ser obra de la mano del hombre. Algunos de los afectados han montado guardia hasta comprobar que los llamados rebuscadores de basura ya no actúan solo a la puerta de supermercados, sino también en las calles del centro donde se ha convertido en norma que los vecinos, mayores en su mayoría, dejen las bolsas en la calle y no en los contenedores.

"El contenedor más cercano nos pilla lejos a mi mujer y a mi" --justifica un residente en la calle Cartas-- "y ya nos ha tocado bajar a recoger la basura porque eso era una verguenza". El servicio municipal de limpieza confirma lo dicho por los residentes. "Nosotros también los hemos visto y se lo hemos comunicado al ayuntamiento, pero nuestro trabajo acaba en limpiarlo", indica un portavoz.

Además de las quejas vecinales, no deja de ser un problema social que haya personas rebuscando en las basuras. Hasta ahora se los podía ver hurgando en los contenedores de los supermercados a la hora del cierre, pero también ahora de madrugada recorriéndose calles enteras. Alrededor de la plaza Mayor, aunque también en avenidas donde las bolsas sí se depositan en los contenedores, pero donde es habitual verlas amontonadas en el suelo a su alrededor. De hecho la ordenanza municipal de limpieza prohíbe abandonar las bolsas de basura a pie de calle.

En este sentido, los vecinos afectados piden al ayuntamiento que ponga más contenedores en el centro, conscientes de la ordenanza y de la dificultad de hallar sitio en calles tan estrechas como son la mayoría. Mientras tanto, solicitan también vigilancia policial para acabar con el problema. "Nos da pena por estos chicos, pero que los ayude el ayuntamiento si necesitan comida o lo que sea, que esto tampoco es solución para ellos y, desde luego, están creando otro problema de suciedad en la vía pública", añaden.