Trabajo en equipo y coordinación entre todos los profesores; fomentar la igualdad a todos los niveles y, sobre todo, mejorar la convivencia en el centro son algunos de los retos que que se ha impuesto el colegio público Miralvalle.

Este es el único colegio de Plasencia que forma parte de la primera Red de Centros Educativos, cuyos miembros han adquirido el compromiso de participar activamente en un proceso de mejora en torno a los valores que integran una cultura de paz, igualdad de oportunidades y no violencia.

"Una vez adheridos a esta red" comenta la directora del colegio María José Oviedo Macías, "adquirimos una serie de compromisos", com son elaborar un proyecto en el centro, implicar al alumnado y sus familias, compartir la experiencia con algún otro colegio de los 18 de la comunidad, entre Cáceres y Badajoz, incluidos en esta esta red.

"Estamos absolutamente sorprendidos del buen clima que ha fomentado el cariñograma en el colegio" , señala María José. La comunidad educativa de Miralvalle ha decidido desarrollar este instrumento para potenciar su compromiso activo con la red educativa, al tiempo que resulta uno de los más curiosos, sencillos y eficaces. "Felicitar o pedir perdón, no son actividades tan sencillas como parecen, pero sí muy importantes" asegura Manuel, jefe de estudios del centro.

El cariñograma es una herramienta de trabajo para entrenar la socialización positiva y potenciar las habilidades emocionales. "Lo hacemos a nivel de alumnado y de profesorado", señalan varios maestros, que explican cómo funciona: "Creamos un panel con el nombre de cada uno de los profesores y vamos dejando pequeños mensajes de agradecimiento, de felicitación o de disculpa a la persona deseada, firmados con nuestro nombre".

En definitiva, la finalidad de esta Red se basa en idear y promover una serie de estrategias educativas en favor de la igualdad, así crear los recursos necesarios para propiciar una educación a favor de los Derechos Humanos.