Que la antigua iglesia de Santo Domingo necesita una rehabilitación es vox populi. Se lo ha pedido incluso el Ayuntamiento de Plasencia a la Junta de Extremadura para que lo incluyera en sus presupuestos, sin éxito.

En el templo, propiedad del obispado, pero cedido a la Administración regional, se guardan la mayor parte de los pasos de Semana Santa de la Unión de Cofradías, que ha montado también esta Navidad su belén, que han visitado unas 26.000 personas.

Precisamente, el presidente de la Unión, Pedro Cordero, preguntado por la situación del templo, ha señalado que, al ser el segundo edificio más grande de la diócesis, su restauración supone «un importante desembolso» y, de hecho, considera que debería contar con un plan director, al igual que las catedrales.

Así, tras haber mantenido «muchas conversaciones» con la Dirección de Patrimonio de la Junta, Cordero ha anunciado que «se está pendiente de plasmar un acuerdo entre la Junta y la Unión, que es a día de hoy lo más importante y se va a hacer durante este año. Quien tiene que actuar es la Junta y nosotros vamos a estar apoyando».

De momento, Cordero señala que han tenido la «suerte de que ha llovido poco porque, cada vez que llueve, hay goteras, que ya tenemos localizadas» y ponen remedios caseros. Además, las humedades han llegado ya incluso al retablo.