Las obras de remodelación de la plaza de la Cruz Dorada empezarán el lunes y obligarán a cerrar el espacio al tráfico. Es la última obra costeada por el Plan de Excelencia Turística e incluye la construcción de un mirador hacia el parque de La Isla y la reordenación de aparcamientos para que puedan aparcar los autobuses turísticos.

Los trabajos, por valor de 244.899 euros, se adjudicaron el 5 de diciembre a la UTE Contrata Centro SA y Tenaos Construcción SA, y comenzarán con dos meses de retraso respecto a la previsión inicial de la edil Raquel Puertas. Sin embargo, ayer aseguró que la subvención del plan no se perderá porque "estamos dentro de plazo".

Así y según ha informado la policía local, desde las siete de la mañana del lunes estará prohibido estacionar en la plaza y además, se cortará el acceso por la avenida del Valle (salida calle San Marcos) y por el paseo del caño Soso, una vez pasada la calle Santo Domingo de Guzmán. Sí se permitirá la entrada a los garajes, mientras que la calle Santo Domingo de Guzmán quedará de dos direcciones, precisamente para facilitar el acceso a las cocheras o La Isla, con lo que estará totalmente prohibido aparcar en esa calle.

El plazo de ejecución de las obras de remodelación de la plaza es de cinco meses y lo único que se conservará de la actualidad será la cruz y tres cedros monumentales. En cambio, el proyecto de los arquitectos Guridi, Tartás y Jubete incluye la reordenación de los aparcamientos, de forma que tendrán cabida tres autobuses, posiblemente un microbús y una veintena de turismos, según indicó Puertas.

Además, se va a derribar el muro que hay entre la plaza y La Isla para construir un mirador con una barandilla, al que se sumará --ya fuera de la obra-- una pasarela hasta el parque, que costeará el ayuntamiento con fondos propios. A esto se añade la renovación total del pavimento y la restauración del antiguo enlosado; la creación de zonas verdes y la instalación de nuevas farolas y mobiliario urbano.