Los ladrones no tuvieron problema alguno en robar en el interior de un coche aparcado en plena plaza Mayor y a las cinco y media de la tarde porque su propietario se lo dejó abierto. Desapareció un mini ordenador personal y diversos efectos personales. Además, se ha denunciado el hurto de un teléfono móvil en el instituto Gabriel y Galán donde un alumno se lo había dejado debajo de la mesa.