Hasta las ventanas comunes de una comunidad de vecinos del Pilar han robado los ladrones, que se tomaron la molestia la noche del domingo de desmontar una a una para llevarse el aluminio dejando en la puerta de la calle los cristales. Se dejaron también una navaja y una receta del médico con nombre y apellido que está investigando la policía, según contaron los residentes del número 1 de la calle Andrés de Plasencia. "¿A dónde vamos a parar? --se preguntaban ayer, alarmados-- porque aquí se han llevado las ventanas y a la vuelta de aquí todos los extintores de otro edificio".

Debieron encontrar la puerta abierta porque no forzaron la cerradura y poco después de las doce de la noche se dedicaron a desmontar las ventanas del primero y del segundo piso que dan al patio de luz. "Escuchamos unos golpes, pero quién iba a imaginarse esto", decía ayer una vecina. "Estamos preocupados porque puedan volver porque si llegan a quitar todas las del patio se podían haber colado perfectamente en la casa" y el caso es que intentaron quitar los hierros de la pared, pero no pudieron.