La salida de la edil Mónica García del PSOE-PREX y su paso a edil no adscrita a grupo alguno supondrá para el ayuntamiento un gasto extra al mes de unos 100 euros.

Esto se debe a que es necesario cambiar la composición de las comisiones. Cada edil cobra por asistir a estas 50,33 euros y, si antes Díaz acudía a dos, ahora lo hará a todas, a cinco, que se celebran al menos una vez al mes. Además, las comisiones contarán con un edil más del PP, para mantener la proporcionalidad.

Por contra, al perder el grupo socialista-regionalista un concejal, la cantidad que cobra por el número de concejales se reducirá en 100 euros, según el ayuntamiento.

En todo caso, fuentes municipales señalaron ayer que el secretario aún estudia si la edil cobrará por todas las comisiones a las que asista.