Con una matanza tradicional en medio de un ambiente festivo celebró el sábado San Gil su undécimo aniversario como entidad local menor. Pero también con el homenaje al alcalde, entonces, de Plasencia, que era Cándido Cabrera, por la colaboración que prestó a la asociación de vecinos de la pedanía placentina que promovió la autonomía. También al vecino, ya fallecido, Serafín Rodríguez, por su implicación. Fue el empeño de Blas Raimundo, alcalde de San Gil y entonces presidente vecinal, el que hizo posible la constitución de la entidad local menor. "De no más de 200 vecinos entonces hemos pasado ya de 300 y lo hemos querido festejar con fiesta y homenaje a quien tanto nos ayudó" explicó Raimundo. No faltó al acto institucional la alcaldesa de Plasencia, Elia Blanco, de cuyo gobierno es Raimundo concejal.