Los ánimos en el barrio de San Miguel están muy encendidos. La noticia de que el instituto vuelve a estar en punto muerto llevó ayer a la Asociación de Vecinos La Unión a advertir de que si Díaz e Ibarra no lo desbloquean durante la semana próxima, hará un llamamiento a la federación de asociaciones de vecinos para organizar una gran manifestación que inevitablemente coincidirá con la campaña electoral dado que la pegada de carteles es el viernes próximo.
Con el apoyo del Movimiento Social por la Universidad (MSU) ya cuenta. Su presidente, Francisco Martín, se sumó ayer al llamamiento vecinal para que la Junta de Extremadura y el ayuntamiento encuentren una solución en un plazo máximo de diez días para el inicio definitivo de las obras.
EL COLMO DE LA PACIENCIA
El nuevo parón se debe a que el ayuntamiento ha advertido de que no puede asumir el desmonte de los terrenos porque la Junta ha pedido la ejecución de un muro de contención que se dispara por encima del millón de euros. El ayuntamiento se comprometió en noviembre a pagar la explanación y la urbanización en previsión de que no superaba los 120.202 euros y la Junta a licitar la obra cuanto antes.
El presidente vecinal de San Miguel, Jaime Collado, ha pedido una solución vía e-mail a Ibarra y a Díaz en persona para que "dejen de enredar porque los alumnos de los colegios de San Miguel y la Escuela Hogar tendrían que estar ya en el instituto y otros muchos de zonas próximas que descongestionarían los institutos de la zona norte".
