Entre cubos para recoger el agua, papeles de periódico en el suelo para no resbalar e incluso paraguas tienen que convivir los vecinos de Vera-Elena dentro de su sede debido a las goteras. La asociación de vecinos ha denunciado que llevan un año con humedades y las gotas de agua caen incluso en un día como ayer, que apenas llovió, por lo que piden al ayuntamiento, como propietario del local, que dé una solución urgente.
La sede de Vera-Elena tiene la particularidad de que el techo es una bóveda de piedra, pero la humedad la ha dañado considerablemente y el agua se filtra por varios sitios: "Nuestros mayores tienen que abrir el paraguas para no mojarse mientras echan la partida, el local está indecoroso", se quejaba ayer José Luis Ventura, miembro de la asociación vecinal. Este explica que hace varios años se reformó por completo, pero a raíz de una zanja que abrió Telefónica comenzaron las goteras.
Los vecinos han advertido del problema en varias ocasiones al ayuntamiento, pero se lamentan de que "seguimos igual. Estás en la sede y te está cayendo el agua encima y además la humedad es muy perjudicial para los que pasamos aquí nuestro tiempo de ocio". Por eso, han vuelto a pedir al consistorio una solución.
En respuesta, la concejala de Obras, Mónica García, se mostró dispuesta a darla cuanto antes: "Creía que los problemas se habían solucionado, pero si no ha sido así, volverá a ir el encargado de Obras para verlo".
