Música, deportes extremos, las últimas tendencias artísticas, nuevas tecnologías, comercio y mucha gente durante siete horas. Estos son los ingredientes que durante la noche del sábado transformaron en "éxito" --según los organizadores-- la segunda edición del Festival Alternativo Norte de Extremadura .

Unas tres mil personas, el doble que el año pasado, se congregaron en el recinto ferial El Berrocal , donde dos escenarios, un mercado, circuitos deportivos, una pista dance y un centro de acceso a Internet aglutinaban una amplia oferta de ocio.

Rosendo era el reclamo principal y de ello dio fe el rockero madrileño, con un breve pero completo repertorio de canciones. A su lado, dos grupos locales le precedieron: Zaleo y Los Jacobos; y entre unos y otros, La Taberan de Moe, SNK33 y Ganyahmun, la banda del hijo de Rosendo.

Al margen de los típicos retrasos, de los colapsos en la barra del bar o el cambio de última hora en el fin de fiesta --estaba previsto que Rosendo cerrase los conciertos, aunque finalmente lo hizo Sugarless--, el festival parece consolidarse. Esa es, al menos, la opinión en la Concejalía de Juventud y Deporte: "Estamos seguros de que esto va a durar muchos años".

Y es que no cabía hueco para el aburrimiento: desde las 20:00 a las 3:00 la música se aderezaba y pautaba con los concursos de graffiteros, break-dance y de skateboard, las exhibiciones de Warhammer, las acrobacias sobre bicicleta de los Fun Bikers, la navegación por internet y las visitas al mercadillo. Todo ello con el objeto de "lograr que el Festival Alternativo del Norte de Extremadura sea un referente en la región y sirva de plataforma de lanzamiento a grupos locales y extremeños".