La entrada y salida a los centros escolares está provocando problemas para la seguridad vial de peatones y conductores en determinadas zonas de Plasencia; sobre todo en la avenida La Salle y el acceso al colegio de las Josefinas. Se trata de una hora en que la se produce un caos circulatorio que sufren a diario centenares de personas.

Reforzar la seguridad vial y los efectivos policiales a las horas de entrada y salida de los colegios e institutos es una petición que tanto padres y madres, como profesores y el resto de la población solicitan a la policía local y a la concejalía de Interior y Tráfico. Actualmente, los agentes de policía controlan el tráfico a la salida de algunos colegios (Ramón y Cajal, Alfonso VIII, San Miguel...), pero de otros no.

"Solicitamos más seguridad sobre todo para que no se produzca ningún accidente que luego haya que lamentar" argumentan padres y madres a la salida del colegio de las Josefinas, donde, precisamente, el martes pasado, un anciano sufrió un atropello, resultando herido leve. A pesar de haber habilitado junto a este colegio concertado nuevas zonas de aparcamientos, estas no parecen ser suficientes y los padres estacionan sus vehículos sobre el acerado e incluso en el campo anexo al centro escolar. A esto hay que añadir que la entrada al colegio está pegada a una rotonda por la que pasa el autobús urbano, así como los autobuses que trasladan a los escolares. En la avenida de Extremadura sucede lo mismo con el alumnado del colegio El Pilar; la situación se agrava a la altura de la glorieta de Procasa, sobre todo los martes cuando se instala el mercadillo textil, ya que los padres de los escolares que van al colegio Inés de Suárez y a San Calixto, no pueden aparcar en la avenida de la Hispanidad.

Llegando al colegio Alfonso VIII y Ramón y Cajal (en la avenida La Salle, donde hace apenas una semana se ha ubicado una nueva parada para autobús escolar y evitar así colapsar la parada del bus urbano) la circulación aumenta se hace mucho más densa. Junto a los centros San José, Escuela Hogar, Madre Matilde y La Salle también hay dificultades a la hora de aparcar, por el déficit de plazas que tienen estas zonas céntricas de la ciudad.