La concejala de Cultura, Marisa Bermejo, junto a la directora del Centro de las Artes Escénicas y la Música de Extremadura (Cemart), Toni Álvarez, presentaron ayer la programación de conciertos del Festival Internacional Folk, que este año llega a su XXIII edición. Se desarrollará del 23 al 25 de agosto en Torre Lucía. También habrá talleres y pasacalles, pero aun están pendientes de confirmación.

Los grupos De la Carmela, de Cataluña, y Kalascima, de Italia, abrirán el festival el jueves 23 de agosto, en Torre Lucía, desde las 21.30 horas, ya que este año se han adelantado media hora.

Para el viernes 24, actuarán El Pelujáncanu, extremeños, Óscar Ibáñez & Tribo, llegados desde Galicia, y Antonio Zambujo, de Portugal. Para la directora del Cemart «esta será una noche para no perderse, pues el grupo extremeño El Pelujáncanu son fantásticos, animan mucho al público que no parará de moverse, además de que tendrán la oportunidad de escuchar aquí las nuevas canciones de su nuevo disco, y también porque está, para mí, el referente de la música portuguesa, del fado, como es Antonio Zambujo», explicó Toni Álvarez.

Y para el sábado 25, y último día del festival, será el turno para los extremeños Cerandeo, después actuarán los asturianos de Stormy Mondays y para cerrar la XXIII edición del Festival Internacional Folk los encargados serán los franceses de Babylon Circus. «Cerandeo tenían muchas ganas de acudir al festival y les hemos dado la oportunidad este año», reseñó Marisa Bermejo.

MÁS ACTIVIDADES / Así mismo, como en años anteriores, también formarán parte del festival la asociación de tamborileros Santiago Béjar, que amenizarán los minutos previos a los conciertos, y también diferentes talleres, aun por determinar, que se celebrarán en la Isla y en las Claras.

Tanto Álvarez como Bermejo invitaron a todos los placentinos, comarcanos y extremeños «a participar de este festival, una de las citas más importantes del verano en Extremadura y con mucha seña de identidad», sentenciaron.

El presupuesto con el que cuenta el festival es de 70.000 euros, de los que 40.000 los pone la Junta de Extremadura, 6.000 la Diputación de Cáceres y el resto el ayuntamiento. Bermejó también pidió «que la Junta de Extremadura pueda aumentar su aportación hasta los 50.000 euros, tal y como era hace unos años», recalcó. La directora del CEMART recogió la petición de la concejala y, aunque no prometió nada, dijo que se estudiará.