Nació en Madrid, pero se crió en Las Hurdes. Grabó sus primeras canciones en Plasencia y ahora da conciertos en Alemania y en julio estará de gira por Estados Unidos. Se trata del pregonero que ayer abrió la feria, Huecco, un extremeño --no le molesta que la Wikipedia diga que ha nacido en Plasencia-- que contesta abiertamente y con sinceridad que se considera embajador de Extremadura.

"Son otros quienes deberían decirlo, pero yo sí me considero embajador de mi tierra. Siempre que puedo, la vendo, hay que aprovechar, los que tenemos salida internacional, para promocionarla. De hecho, voy a tocar de nuevo en Alemania y me llevaré unas muestras de aceite de oliva, me gusta hablar de la tierra".

Pero a pesar de su proyección, de sus próximos conciertos en Boston, Filadelfia o Los Angeles, Huecco sigue apostando por Las Hurdes para componer. "Antes iba allí todos los veranos, pero ahora tengo un pequeño estudio de grabación y casi todo el año me escapo para grabar ideas porque, como se está allí, no se está en Madrid. En Las Hurdes hay silencio, naturaleza y en Madrid hay ruido y contaminación". Además, lo primero que hará nada más recoger a su hija, de vuelta de Los Angeles, será "llevarla al pueblo para que toque a las cabrillas".

Un ejemplo del respeto que siente por su tierra es el escenario que utilizó ayer para su concierto de Plasencia, adquirido para la ocasión. "Es el único concierto que voy a dar con este superescenario, pero es mi apuesta por la tierra porque este concierto tiene que ser especial", decía minutos después de realizar las primeras pruebas de sonido.

Lo estrenó con el tema La Mamba Negra y continuó con una actuación que tuvo, sobre todo, ritmo. Huecco no defraudó en una feria que ha vivido de cerca: "La recuerdo con mucha gente, mucho ambiente y grandes grupos tocando, que yo sea hoy uno de esos grupos es un sueño cumplido".