"¿Es posible que haya más zonas verdes en la ciudad?, ¿Hay muchas discusiones entre los concejales?, ¿Se va a cambiar la feria de sitio?". Todas estas complicadas cuestiones, y muchas más, fueron respondidas en directo y sin preparación previa por la alcaldesa Elia Blanco ante la atenta mirada de una decena de periodistas.

Sin embargo, no fueron los informadores los encargados de plantear las preguntas, ni tampoco los ediles de la oposición los que interrogaron a Blanco, sino un grupo de más de cincuenta niños del colegio San José, que acudieron ayer a conocer el salón de plenos municipal y a aprender cómo funcionan los mecanismos de toma de decisiones en el ayuntamiento de la ciudad.

En su visita, los pequeños pudieron sentirse como políticos y periodistas, al menos por unos minutos. Muchos de ellos se sentaron en los escaños de los concejales, otros ocuparon los puestos de los funcionarios municipales y una mayoría de alumnos se ubicaron como espectadores privilegiados, con derecho a preguntar.

Y así fue. Elia Blanco contestó, una a una, a todas las cuestiones, algunas nada sencillas. "Mirad, claro que es bueno que haya más zonas verdes, ¿pero no creéis que es también muy importante conservar en buen estado las que ya tenemos?". Uno de los niños asiente y confirma: "Es verdad, hay que mantener los parques limpios".

La jornada concluyó con los escolares respondiendo a la alcaldesa, que quiso saber cuántos querrían ser ediles. Menos de diez alzaron sus brazos. Sin embargo, Blanco también preguntó si les gustaría ser alcaldes. Ahí hubo unanimidad. Todos se apuntaron.