Los proyectos que maneja el ayuntamiento para la instalación de los pivotes magnéticos en el centro con cargo al Plan de Excelencia Turística prevén no sólo eliminar totalmente los accesos a la plaza sino también cerrar las entradas al rincón de San Esteban y las plazas del Salvador y San Nicolás.

Pese a ser dos empresas distintas las que hasta ahora han presentado propuestas, Sice y NorTrafic, ambas contemplan colocar pivotes en las mismas calles, aunque en un caso cerrarían tanto las entradas como las salidas y en otro dejarían todas las salidas abiertas, lo que implicaría un plan previo del tráfico.

PLAZA DE ABASTOS Respecto a las entradas al centro, la novedad radica en la instalación de pivotes en la puerta de Coria, lo que impediría la entrada a San Nicolás y al parador de turismo, que se limitaría sólo a la calle Blanca; en la entrada a la calle Santa Ana desde la avenida del Generalísimo, lo que significa que los vehículos no podrían acceder a la plaza del Salvador salvo por Pedro Isidro, aunque para eso habría que entrar primero a la plaza, y en el acceso al rincón de San Esteban, que cerraría la entrada a la plaza de abastos.

A éstos hay que unir además los pivotes que ya existen en la calle del Rey, Sol, Zapatería y la calle Talavera, con lo que el cierre de la plaza sería total. Además, un proyecto contempla pivotes tambien en Trujillo y Los Quesos, con lo que tampoco habría salida alguna.

El cierre, eso sí, no afectaría a los residentes, comerciantes, vehículos de emergencias ni a los taxis, según ha advertido la concejala de Tráfico, Josefa Pérez. Lo que está por decidir es si se les facilitará una tarjeta magnética o un mando a distancia, que son las dos opciones propuestass. Esta es una de sus diferencias, junto con el sistema de control de los pivotes, que podría ser a través de la fibra óptica o de la telefonía móvil, por el que tanto la edil de Tráfico como la de Turismo, Raquel Puertas, se han mostrado a favor, ya que el primero obligaría a levantar las calles para realizar las conducciones hasta la futura sede la policía local, donde estará el control de los mandos.

Con todo, ambas insistieron en que antes se consultará a los empresarios, comerciantes y vecinos, si bien la alcaldesa ha advertido que el horario es discutible, pero no los pivotes.