Los vecinos del Rosal de Ayala ya no tendrán que hacer complicadas maniobras para acceder al barrio de Miralvalle o la avenida de La Salle por la calle Luis de Morales, puesto que la concejalía de Obras ha adjudicado la reforma de la plazuela Luis de Zúñiga --afectada por un cuello de botella -- a la empresa Urbamon, que comenzará los trabajos de remodelación el próximo julio.

"Sin duda es una obra necesaria porque queremos aliviar el problema del tráfico y darle un uso a esta plazuela", declaró ayer la concejala de Urbanismo, Mónica García, quien de este modo espera solventar una de las demandas históricas de la asociación de vecinos del barrio.

ZONA COMPLICADA La calle Luis de Morales se convierte por su estrechez en un incómodo cuello de botella , que se agrava por los estacionamientos de toda clase de vehículos en doble fila que dificultan la circulación. Por este motivo, la edila espera "mejorar la fluidez del tráfico en esta zona tan complicada del barrio" delimitando las bocacalles y la zona verde que hace esquina.

Además, Mónica García explicó que el proyecto prevé la recuperación del espacio central de la plazuela "para que los ciudadanos dispongan de un lugar de convivencia en el que se instalará mobiliario urbano" y el soterramiento del cableado aéreo de toda la zona.

La reforma llega con mucho retraso, puesto que en varias ocasiones el proyecto ha quedado desierto. Finalmente, Urbamon lo ejecutará por 120.000 euros en cuatro meses.