El alcalde explicó ayer que el acuerdo con el sector del taxi de ubicarse en el lugar que ahora ocupa la parada del bus turístico y el acuerdo con el comercio de la calle Talavera de que la parada se desplace 50 metros supone la necesidad de hacer una obra previa para que los autobuses puedan dar la vuelta. "Son obras que nos cuestan dinero", dijo, mientras se desconoce dónde podrá ubicarse la marquesina prevista en la parada de taxis inicial.