La semana pasada, el Ayuntamiento de Plasencia y la UTE Aguas de Plasencia firmaron el convenio por el que esta última debe realizar obras en la ciudad por valor de 10,5 millones de euros en tres años. Ayer, el gerente de Aguas de Plasencia, Iván José Vicente, adelantó que ya están trabajando para contratar el primer montante de obras y que su intención es iniciarlas antes de que termine este año.

De hecho, su idea es tener firmado este mismo mes el contrato con la empresa o empresas que ejecutarán un conjunto de actuaciones valoradas en 3,5 millones de euros. Se trata de obras que ya estaban proyectadas cuando se adjudicó a la UTE la gestión del agua en Plasencia, pero no llegaron a ejecutarse. Como todas tienen su correspondiente proyecto, solo es necesario contratar las obras.

contratadas este mes / En este sentido, Vicente explicó ayer que ya ha contactado con varias empresas, media docena, tanto de Plasencia como foráneas, para que presenten sus presupuestos. No está decidido aún si será una única empresa la que ejecutará todas las obras o se contratarán por lotes. «Lo normal es que lo haga una única empresa, pero hay algunas que no tienen capacidad y habrá que ver si se contrata por lotes o no».

Además, la empresa placentina Araplasa forma parte de la UTE y, por convenio, «tiene derecho de tanteo», es decir, que, con todos los presupuestos en la mano, tendrá la última palabra y, si iguala la mejor oferta, se quedaría con las obras. «Conoce el terreno y es una de las principales candidatas», subrayó Vicente.

Otra posibilidad es «ofertar todo el paquete» de obras, el montante de 10,5 millones, a una o varias empresas «con una experiencia mínima en instalaciones de tuberías».

El gerente explicó que, entre las primeras actuaciones que se harán está una nueva tubería para transportar agua desde el depósito de Los Pinos hasta el del polígono, porque sufre muchas averías. También, la construcción de un nuevo depósito en el hospital, además de actuaciones en la estación de agua potable y cambios de tuberías de abastacimiento y saneamiento en un grupo importante de calles de la zona intramuros. Antes de comenzar, la UTE quiere coordinarse con el ayuntamiento y la policía para «causar las menores molestias posibles».