Los residentes en el centro y sobre todo en las calles Cartas, Toros, El Pollo, Melo o Santa Ana están hartos de soportar el hedor de los orines en muchos casos a la puerta de sus casas y han pedido el amparo de la Asociación de Vecinos Zona centro para que interceda ante el ayuntamiento porque las protestas que le han hecho llegar a título particular han caído en saco roto.

La plaza de Sosa es representativa de la situación no sólo por los malos olores, sino también por las manchas en el pavimento. Es el rastro de la movida porque en esta zona se concentra la mayor parte de los locales nocturnos de copas y es habitual también la imagen de los vasos abandonados en portales de viviendas y comercios.

Estos vecinos arrastran el problema desde hace años, pero se han decidido a pedir públicamente una solución al ver el interés que se ha tomado la concejala de Servicios Municipales, Carmen Blázquez, por combatir la falta de limpieza viaria. De hecho, la policía local ya viene poniendo multas por sacar la basura a deshora o abandonarla fuera de los contenedores.

A 60 EUROS "¿Acaso no es esto una enorme falta de limpieza y desde luego de higiene? Que se dé una vuelta la policía cualquier noche de movida y verá cómo puede poner multas por orinar en la calle". Lo dice una mujer que resume el sentimiento de sus convecinos en "pura impotencia". La ordenanza municipal lo sanciona con sesenta euros, pero apenas se registran multas en los partes policiales.

Mientras tanto, hay vecinos que lo combaten a primera hora de la mañana arrojando cubos de agua y asumen la limpieza de la entrada a su casa en plena vía pública. Esto no ocurre ya sólo la noche del sábado, sino cada vez más los jueves y cada vacaciones como ahora por Navidad sin que el ayuntamiento haya tomado nunca medidas para atajarlo.

Ahora los afectados apelan a la sensibilidad del nuevo gobierno del PSOE, que ha sido el primero en mucho tiempo en multar las infracciones de limpieza tras llevar a cabo una campaña de concienciación que contó además con la colaboración de algunas asociaciones de vecinos cuyos directivos salieron con la concejala Carmen Blázquez a retirar basura de las calles.

Los denunciantes son conscientes de que la policía local no puede estar dedicada a controlar esto, pero están convencidos de que "pongan unas cuantas una noche y verán como más de uno se lo piensa". Se basan en que esto fue lo que pasó con las primeras sanciones por hacer botellón fuera del ferial y, de hecho, la policía asegura no haber visto ningún botellón incontrolado.