Los vecinos y comerciantes de la avenida de la Vera están hartos de esperar la ampliación del acerado. Así, han vuelto a alzar la voz para pedir que se elimine ya una fila de aparcamientos para ampliar las aceras, "ahora intransitables tanto por su estrechez como por su estado porque incluso mucha gente ya ha sufrido tropezones", se quejó ayer José Luis Ventura, secretario de la asociación de comerciantes y vocal de la asociación de vecinos.

Ventura advirtió de que ambos colectivos llevan más de diez años pidiendo al ayuntamiento que arregle la zona. Con la edil de Obras, Mónica García, se reunieron en marzo y ésta se comprometió a iniciar los trabajos este año, pero "ya estamos muy cansados de esperar, hemos sido pacientes pero todo tiene un límite", subrayó.

Para Ventura la obra es muy urgente porque el estado actual de la avenida está afectando incluso a las ventas: "Esta calle es una buena zona comercial con más de cien establecimientos pero su mal estado está provocando que los ciudadanos se vayan a comprar a las grandes superficies porque hay mejor acceso".

Además, se queja de que para cualquier ciudadano "transitar es casi imposible porque si se cruzan dos personas, una de ellas se tiene que apartar. Además, han echado tantas capas de alquitrán en la calzada que ya ni siquiera existe diferencia entre ésta y la acera".

Ventura aprovechó también para advertir del problema de la iluminación en la zona ya que las farolas se instalaron hace varios años y desde entonces, no se han cambiado las bombillas. Algunas se han fundido y otras, aunque siguen alumbrando, dan una luz poco potente. "Cuando están las luces de los escaparates encendidas se ve algo más, pero en cuanto se apagan, la avenida parece la boca del lobo".