El presunto autor del tiroteo que dejó dos heridos de bala en el cerro de San Lázaro el pasado mes de abril se enfrenta a una pena de doce años de prisión, después de que el fiscal reiterara ayer en el juicio la petición de cinco años por cada delito de lesiones que supuestamente causó a las víctimas y otros dos más por tenencia ilícita de armas.

La disputa comenzó tras una pelea previa entre jóvenes que acabó con uno de los implicados herido en una oreja tras haber sufrido un mordisco. A la mañana siguiente, el padre de uno de ellos acudió, presuntamente, a casa de sus vecinos para zanjar el asunto, que definitivamente concluyó con dos hombres, de 65 y 39 años, ingresados en el Hospital Virgen del Puerto tras recibir un tiro cada uno, que les hirieron en un brazo y una pierna, respectivamente, como consecuencias de los disparos del ayer juzgado.

El juicio se celebró ayer en el Juzgado de lo Penal en medio de una gran expectación, con familiares de los implicados y también con la presencia, como testigos, de nueve policías y otros cuatro ciudadanos. Incluso hubo declaraciones y pruebas periciales que se mostraron utilizando un sistema de videoconferencia.

Tras escuchar a todas las partes, el fiscal reiteró su solicitud de doce años de cárcel para el autor de los disparos, y además pidió la pena de dos años y seis meses para el presunto autor del mordisco, y una condena de dos meses de multa para el otro joven implicado.