El albergue juvenil de Alburquerque se ubicará en parte del antiguo convento de la Madre de Dios, situado en la calle San Andrés, una vez que no podrá seguir utilizándose las dependencias del Castillo de Luna, dado que éste va a albergar una hospedería. Con este anuncio por parte del alcalde Angel Vadillo se despeja uno de los interrogantes y preocupaciones de los alburquerqueños, que temían que, al destinarse el castillo a hospedería, se perdiera el albergue y, con él, la llegada de personas a lo largo de varios meses para dejar ingresos en la localidad.

En este sentido, la corporación aprobó por unanimidad de sus tres grupos, PSOE, PP e IU, la desafectación del edificio que acogerá el albergue, que pasará de ser un bien de dominio público a uno de carácter patrimonial.

Este edificio municipal, anexo a la iglesia de San Francisco, ha tenido diversos usos a lo largo de la historia, desde que desapareciera su utilización como convento tras las leyes desamortizadoras del siglo XIX. Posteriormente, se dividió en dos partes, una de carácter privado, y la otra que quedó en manos del ayuntamiento.

Entre otros destinos, fue primero colegio de segunda enseñanza, y después instituto de enseñanza Secundaria, centro cultural y una escuela taller.