La Patrulla Fiscal y de Fronteras de la Comandancia de la Guardia Civil de Badajoz, que prestaba servicio en las vías de comunicación del termino municipal pacense de Villafranca de los Barros, interceptó un furgón de alquiler, conducido por un vecino de Villanueva de la Serena, en el que halló 320 kilos de tabaco , supuestamente de contrabando.
En el transcurso de la identificación de esa persona, los agentes detectaron un fuerte olor a tabaco procedente del interior de la furgoneta, por lo que procedieron a su inspección.
Los guardias se encontraron con dos cajas de cartón que contenían un total de 320 kilos de tabaco semipicado, mercancía que se estimó en una valoración de en torno a los 55.000 euros.
SIN DOCUMENTACIÓN / Los agentes de la Guardia Civil pudieron comprobar que el tabaco carecía de toda documentación y etiquetado preceptivo, por lo que se intervino e instruyeron al conductor diligencias como investigado por un delito de contrabando.
Ahora, la Guardia Civil investiga la procedencia y el destino final del tabaco. Éste, supuestamente, se utilizaría para la elaboración y fabricación casera de cigarrillos de tabaco, y su posterior venta clandestina sin ningún control sanitario.
Así, las diligencias instruidas fueron remitidas al Juzgado de Instrucción de Villafranca de los Barros.
