Peloche, pedanía de Herrera del Duque, inauguró en la tarde de ayer su estatua de El Danzante, homenaje a los siete danzantes masculinos que desde hace más de 300 años bailan siguiendo un rito de homenaje durante las fiestas de San Antón Abad. La estatua ha sido realizada en bronce por el escultor cauriense Machaco y fue descubierta por el presidente de la diputación, Miguel Ángel Gallardo; el alcalde de Herrera del Duque, Saturnino Alcázar, y un danzante.

Gallardo dijo que Peloche representa el esfuerzo, trabajo y sacrificio del mundo rural extremeño pero también su futuro, pues cuenta con todos los ingredientes del modelo turístico que se está demandando en la actualidad.

La ceremonia de inauguración comenzó con la recogida de las autoridades por parte del grupo de danzantes para dirigirse a la rotonda donde se ha situado la estatua.

Los danzantes, acompañados por dos guitarristas, lucían pantalón oscuro, camisa blanca con chorreras en cuello y mangas, dos tiras bordadas que le cruzan el pecho y la espalda, chaleco bordado con flores prendidas a la espalda, pañuelo de seda con anillo y broche al cuello y mantón de Manila anudado a la cintura.

Bajo el pantalón llevan prendidos cascabeles que producen un sonido característico con el que da comienzo la fiesta. También tocan castañuelas de madera de brezo, elaboradas artesanalmente.

Los danzantes se eligen cada año de entre los habitantes de la localidad y ensayan con dedicación durante los días previos al comienzo de la fiesta. Actúan tanto con motivo de las novenas al santo, donde despliegan todos los pasos de su danza que dura una media hora y se divide en dos partes, como en la procesión de San Antón Abad.

Gallardo afirmó que «es un honor y un placer» conocer esta histórica tradición de Peloche, que puso como ejemplo del mundo rural, para «sentiros orgullosos de tres siglos de historia.