La estatua de Hernán Cortés situada desde hace más de 100 años en la plaza de la localidad de Medellín, ha aparecido esta mañana teñida de rojo. Al parecer, en el tramo horario de tres de la madrugada a cinco, varios individuos habrían pintado esta escultura, dejando panfletos "explicativos" de su acto.En ellos, los autores de este hecho reivindican la revisión de la escultura, haciendo alusión a "la cabeza despojada de un indio que está bajo el pie del descubridor de México, Hernán Cortés". Y añaden "La ética y el valor estético nos hace cuestionar el contenido de la obra y su exhibición, y nos lleva a intervenir en la imagen, sin deformar la estructura. Utilizamos para ello pintura, porque pensamos que añadiéndole el color de la Roja, y aprovechando la bola entre los pies enriquecemos esta triste caricatura".Asimismo aluden en su comunicado a la conmemoración del Bicentenario de la Independencia de México y al hecho de que precisamente hoy se dispute un partido de fútbol entre España y México.Además, aseguran que esta escultura es una ofensa para el pueblo de México, que reconocería como "un gesto de autocrítica sencillo y sincero el retirar definitivamente esta escultura. Debemos reparar con máxima urgencia nuestro insulto, esta glorificación cruel y arrogante del genocidio", añaden.Para finalizar, dedican en el panfleto este acto a "una amiga de la capital mexicana, que lloró, vomitó y nos hizo sentir vergüenza el día que la llevamos a la bonita localidad de Medellín".Por su parte, el alcalde de la localidad, Antonio Parral, ha calificado estas conductas como "caciquiles, que están fuera del contexto democrático en el que vivimos. Se trata de un atentado a una obra de arte, un elemento del patrimonio nacional, por lo que no tiene sentido ni explicación".A lo largo de la mañana han recibido una visita de una empresa de restauración para hacer una valoración de los daños y se les ha aconsejado restaurar el monumento lo más rápido posible.La Guardia Civil investiga ya los hechos.