Agentes de la Unidad de Seguridad Ciudadana, Servicios de Intervención Rápida y Canes adiestrados en la búsqueda de sustancias estupefacientes de la Comandancia de la Guardia Civil de Badajoz detuvieron a un vecino de la localidad madrileña de Miraflores de la Sierra, como presunto autor de un delito de tráfico de drogas, según fuentes de la propia comandancia.

Fue en la tarde del pasado lunes, cuando los agentes que participaban en un dispositivo de control, en la carretera A-66, a su paso por el municipio pacense de Puebla de Sancho Pérez, interceptaron un vehículo ocupado por una persona.

Una vez que se identificó a su conductor y único ocupante, los agentes observaron cómo en el maletero y en el asiento trasero, transportaba ocultos con mantas siete fardos, de los que el ahora detenido, relató a los agentes que contenían comida para pasar el Ramadán.

En la inspección que llevaron a cabo, los agentes pudieron comprobar que lo que realmente contenían dichos fardos eran tabletas de hachís, que arrojaron un peso total de 225 kilos de hachís, de los que se obtendrían unas 900.000 dosis en el mercado ilícito.

Con esta actuación, la Guardia Civil impidió que la droga intervenida, procedente del sur de la península, fuera transportada a la localidad madrileña de Miraflores de la Sierra, lugar de residencia del ahora detenido, para su supuesta distribución y venta, siempre según fuentes de la propia comandancia.

Las diligencias instruidas, junto con la persona detenida, fueron puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de Zafra.