Un informe realizado por el ingeniero agrónomo catalán Luis Uriz Pascual asegura que el sector vitivinícola de Tierra de Barros perderá en torno a 3.000 millones de euros durante los próximos 25 años debido al impacto directo de la refinería que pretende instalar en la zona el Grupo Gallardo.
El estudio fue encargado por la Asociación de Empresas Vinícolas de Extremadura (Asevex), que lo ha hecho público, aunque no valora de forma concreta muchos de los presuntos impactos. Aún así, asegura el informe que cada año el sector perderá 85,2 millones de euros y 1,5 millones de jornales en el campo y más de 1.000 en las bodegas.
Señala, asimismo, que sufrirán daño unas 100.000 hectáreas de viñedos, además de un centenar de bodegas. Este agrónomo catalán considera que también supondrá un impacto directo sobre el valor de la tierra, que cifra en una bajada en los precios de 12.000 euros por hectárea en la zona que se vea más directamente afectada por esta industria, que cuenta con el respaldo y la participación de la Junta de Extremadura.
Antonio Medina, presidente de Asevex, asegura que se encargó este estudio "para calcular los graves perjuicios que podría ocasionar en el sector si se lleva a cabo dicha instalación en esta comarca".
