La Junta de Extremadura inicia "un proceso de investigación interna para esclarecer todo lo posible" el caso de la niña nacida en el año 1990 en el Hospital Materno Infantil de Badajoz y que, según han denunciado sus padres, vecinos de Salvatierra de los Barros, habría sido robada entonces.

La vicepresidenta Primera y Portavoz del Ejecutivo extremeño Dolores Pallero explica que el Gobierno regional "se pone a disposición de la familia y la autoridad judicial" para poder facilitar toda la información que sea necesaria sobre el caso.

Del mismo modo, Pallero recuerda que al igual que "todos" los usuarios del Servicio Extremeño de Salud (SES) pueden consultar sus historiales clínicos también se permitirá el acceso a los familiares de la desaparecida su historial para que se "esclarezcan" lo ocurrido, "en caso de que así fuera necesario".

En este sentido, la consejera de Sanidad y Dependencia de la Junta, María Jesús Mejuto, también anuncia una investigación tras conocerse hoy la denuncia de este matrimonio, que ha sabido la pasada semana que el ADN del cadáver de la niña que fue enterrada tras morir a los pocos días de nacer y que creyeron era de su hija no se corresponde con el de su supuesta madre biológica.

En mayo de 1990, tras dar a luz a una niña, los médicos comunicaron a este matrimonio que la niña había fallecido por problemas cardíacos.

La consejera recuerda, no obstante, que en esas fechas la Junta de Extremadura no había asumido aún las competencias sanitarias.