En su quinta edición, el Carnaval de Verano de Monesterio está más que consolidado como una fiesta imprescindible en la época de estío. Una actividad que surgió de la sugerencia de un grupo de vecinos, y que con el paso de los años se ha convertido en toda una referencia de cómo divertirse y pasarlo bien, con la participación de miles de vecinos y veraneantes, a los que se añaden participantes de diferentes localidades de la comarca.

Disfraces, colorido y alegría, en una larga velada que comenzó a las nueve de la noche en El Llano, desde donde partió el multitudinario desfile de carnaval, que en esta edición, finalizó en el Pabellón de Cristal, hasta donde se trasladó el público en una fiesta que se prolongó hasta las cuatro de la madrugada.

CONCURSOS / El ayuntamiento otorgó premios, tanto en metálico, como en forma de paletillas ibéricas, para los mejores disfraces individuales y en grupo, en modalidades infantil, jóvenes y adultos, así como para el mejor carro y el grupo más animado. A estos premios se sumaron los que se repartieron en forma de sorteo durante la fiesta musical, que estuvo amenizada por DJ Rega.

A criterio del jurado calificador, los premios recayeron en La Macedonia, como grupo más animado; La caída de Roma, al mejor carro; Luis Hernández, (Pirata del Caribe), en individual infantil; Diosas Medusas y Los Minions, mejores grupos infantiles; Rugby, mejor disfraz colectivo juvenil; Pauli Delgado, individual adulto; y Wins Club, mejor disfraz colectivo adulto.

Juan Molina, concejal responsable del área de cultura, quiso «agradecer la implicación de niños y mayores», en una fiesta que transcurrió sin ningún tipo de incidentes. Molina, que auguró «una larga vida» a esta propuesta estival, reconoció públicamente la labor y el trabajo del «personal de la casa de la cultura», así como la «implicación» de todo el pueblo, para conseguir una fiesta «cada vez más participativa».