Dos de las socias más longevas y veteranas de la Asociación de Mujeres rurales Sierra de Aguafría, de Monesterio, Manuela Florencio Chavero y Josefa Cantillo Donoso, recibieron un emotivo homenaje en un acto celebrado con motivo del Día Internacional de la Mujer. En nombre de la asociación, Manoli Bautista, responsable de cultura de este colectivo, quiso significar la importancia «del símbolo de la vida y el amor» que representan todas las mujeres.
En el acto también tomaron la palabra Juan Molina, concejal de Cultura del ayuntamiento, y el alcalde, Antonio Garrote. Molina puso el acento en el valor de las «amas de casa», lugar desde donde «se hace realmente el cambio de sociedad». En este sentido, manifestó que «debemos concienciar a nuestras hijas de que ellas pueden llegar muy lejos». Por su parte, el alcalde definió al colectivo femenino como «pilar fundamental del desarrollo de los pueblos» y agradeció el trabajo que desarrolla esta asociación a lo largo de todo el año.
Antes del homenaje, el músico Felipe Martínez interpretó al órgano el popular adagio de Albinoni, que dedicó a todas las mujeres. Finalmente, antes de compartir merienda, las asociadas rindieron tributo a sus compañeras Manuela Florencio y Josefa Cantillo. Tras un recorrido por sus biografías, --no exentas de dificultades para sacar adelante a sus familias--, las responsables de la asociación les hicieron entrega de una placa conmemorativa y un ramo de flores. En nombre de Josefa, que no pudo asistir al acto por encontrarse ingresada en el hospital de Llerena, acudió su nuera Dolores, quien, nada más finalizar la actividad viajó hasta el centro hospitalario para llevarle los regalos recibidos, ante la «enorme ilusión que le hacía recibir este reconocimiento por parte de sus compañeras».
