La sequía ha provocado la pérdida de producción de entre el 30 y el 40% del olivar y entre el 25 y el 36% de uva en la zona de Villafranca de los Barros, según los cálculos de la cooperativa San Isidro. Esta menor cantidad de productos ha provocado que el precio, sobre todo de la aceituna y el aceite, sea mayor.