La empresa cárnica Señorío de Olivenza SL transformará al año unos 100.000 cerdos ibéricos en la fábrica que abrirá en Olivenza. La planta, que estará terminada en noviembre, prevé invertir 6,6 millones de euros y creará inicialmente 10 puestos de trabajo, aunque en dos años podrían llegar a 70.

Así lo explicó ayer el responsable de la firma, Ramón Martín Sánchez, tras entrevistarse con el presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, junto al alcalde Ramón Rocha, para presentarle el proyecto de apertura de una factoría de salazones cárnicas y secadero de jamones.

El empresario señaló que al año producirán unos 400.000 jamones y paletas de cerdo ibérico.

El destino de la producción será la la exportación "a todo el mundo" porque, por ejemplo, "estamos homologados para vender a Estados Unidos", informó.

Martín Sánchez explicó que la empresa procede de Salamanca y que es "tradicional" porque es dirigida por "la cuarta generación" de la misma familia.

Respecto a la elección de Olivenza para ubicar la planta, señaló que conocían la zona desde hace tiempo porque la mayoría de los cerdos que sacrifican proceden de Extremadura.

Otro aspecto a destacar es que la tecnología es de procedencia italiana que permite, por ejemplo, la autorregulación térmica del interior, ya que los ventanales se abrirán o cerrarán automáticamente en función de la temperatura exterior.

"Con la ayuda del alcalde y de las concejalías, iremos adelante y haremos una obra importante para Extremadura", señaló.

Por su parte, Rocha subrayó la importancia de esta iniciativa debido a la entidad del gasto y a los empleos que se ofertarán.