La hipoterapia, el poder curativo del caballo, es una experiencia innovadora y pionera que, desde hace varios meses, está realizando el Centro Aprosuba 1 de Zafra y en la que participan 14 alumnos con parálisis cerebral y autismo.
Según Juan Francisco Mancera, fisioterapeuta del centro, la hipoterapia es una herramienta rehabilitadora divertida "en un medio natural, es capaz de conseguir nuevos estímulos".
La monta terapéutica aprovecha los movimientos rítmicos y repetitivos del caballo para mejorar la movilidad articular, el equilibrio, así como el tono muscular, coordinación, reduce patrones de movimiento anormal y corrige problemas de conducta, e incrementa la interacción social y aumentar la comunicación gestual y oral.
Esta actividad se realiza en el Centro Ecuestre La Dehesilla , de Puebla de Sancho Pérez, que dirige Juan Rodríguez quien, desde el inicio, mostró un enorme interés por el proyecto "es increible cómo el caballo percibe que se trata de una persona diferente y se comporta de forma distinta a como lo haría con alguien sin discapacidad".
PRIMER PASO
El primer paso en estas sesiones es la toma de contacto con el animal, acariciándolo, cepillándolo y ofreciéndole comida, de forma que se fomente la confianza con el animal y desarrollo los sentidos. El siguiente paso es montar en el caballo, con la hipoterapia no hay músculo al que no se emita un estímulo, ya que un caballo al paso transmite, según Mancera, 110 impulsos diferentes por minuto y provoca un movimiento de la pelvis y de la espina dorsal similar al producido al caminar "supone una experiencia única para los que están en silla de ruedas".
Uno de los alumnos en los que se ha visto una respuesta espectacular ha sido Francisco Javier Pérez, que padece una tetraparesia espástica postraumática y que sólo emitía sonidos ininteligibles. A la tercera sesión, según explicó el fisioterapeuta, comenzó a decir palabras.
En el resto de los chicos los beneficios también han desbordado las expectativas creadas "es muy gratificante observar lo alegres, abiertos y participativos que están", dicen los auxiliares, Manoli Benítez y Leandro Márquez.
