Los municipios pacenses de Ribera del Fresno e Hinojosa del Valle, que sufrieron el pasado 12 de agosto una fuerte granizada que afectó a sus cultivos y plantaciones, podrían recibir el próximo año más fondos con cargo al Acuerdo para el Empleo y Protección Social Agraria (AEPSA).

Así lo ha anunciado hoy, en declaraciones a los medios, la delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira, tras el encuentro que ha mantenido esta mañana sobre este asunto con los alcaldes de Ribera del Fresno, Piedad Rodríguez, e Hinojosa del Valle, Juan Durán.

Pereira ha recordado que ambas localidades sufrieron el 12 de agosto una fuerte tormenta de granizo que afectó a más de 350 hectáreas de viñedos y de olivos, lo que supone, además de una pérdida económica importante, también de puestos de trabajo y peonadas en una época como ahora en plena vendimia y en la que se acerca la recolección de la aceituna.

Para paliar la pérdida de puestos de trabajo, Pereira convocará de manera extraordinaria una comisión provincial de la AEPSA para que en el reparto de 2012 "se tenga en cuenta esta circunstancia" y se dé una asignación mayor para estas poblaciones en aras a que puedan recuperar los puestos de trabajo y jornales perdidos.

Otra de las medidas que se van a estudiar junto con la Junta de Extremadura, ha apuntado, es la posibilidad de arreglar los caminos rurales con el plan puesto en marcha con este fin y financiado por el Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino (MARM) que gestiona la Junta de Extremadura.

Esta medida también podría contribuir a ayudar a los agricultores en sus explotaciones agrarias, aunque ha informado de que "lo que es asegurable, no es indemnizable directamente y no se le pueden dar indemnizaciones porque se hacen a través de las compensaciones y las ayudas para el seguro que el MARM tiene en marcha".

Ha planteado, además, la posibilidad de que las infraestructuras dañadas puedan beneficiarse de las medidas aprobadas por el Ministerio de Interior para resolver situaciones derivadas de catástrofes.

Por su parte, Rodríguez ha concretado que, según los datos recabados, ambos municipios cuentan con unas 6.000 hectáreas afectadas por la granizada, unas 2.500 significativamente dañadas de cultivos de olivar y viñedos, fundamentalmente.

La alcaldesa ha lamentado la pérdida "significativa" que ha supuesto la tormenta en lo que a puestos de trabajo se refiere, tanto de agricultores que han visto afectadas sus explotaciones, como de los jornales de la recolección que se han perdido.

Durán ha cifrado en unos 14.700 los jornales perdidos, cerca de 800.000 euros.

Pregunta por qué soluciones han aportado otras instituciones, Rodríguez ha señalado que la Consejería de Agricultura no se ha puesto en contacto con ninguno de los municipios "para preocuparse del tema y recabar información".

Este organismo, ha añadido, "se ha dado por enterado una vez que ha tenido repercusión mediática el tema" y "se ha puesto a trabajar al parecer unilateralmente porque con nosotros no ha tenido ningún contacto".