Todas las personas mayores o incapacitados que tienen solicitada ayuda domiciliaria a los Servicios Sociales de la localidad cuentan con ella en estos momentos. Unas 269 familias están siendo atendidas por las 68 mujeres que realizan esta labor social en la actualidad y que pertenecen a tres programas distintos.

De ellas, 20 son trabajadoras que dependen de los Servicios Sociales del municipio, trabajos que están subvencionados por parte de la Junta de Extremadura. Otras quince están participando en el taller de empleo de ayuda domiciliaria y ayer el alcalde de la localidad, José María Ramírez, recibía a las 33 empleadas restantes que pertenecen al programa de inserción de la Comunidad Autónoma. Los contratos de estas trabajadoras son de un año de duración y este proyecto experimental está financiado el por el Servicio Extremeño de Empleo.

SIN LISTAS DE ESPERA

Con todas estas mujeres desarrollando este trabajo, la lista de espera que existía en la población está cubierta, por lo que aquellas personas mayores que necesitan atención personal o ayuda en las tareas domésticas están contando con ella. El alcalde destacaba durante el recibimiento a las trabajadoras la importante labor social que desarrollan, "las personas que reciben estas ayudas son las más necesitadas de la localidad, esta es una labor que los ciudadanos de a pie no ven, pero tenemos la satisfacción de que no hay nadie esperando una lista para que se le atienda" comentó.

OTROS SERVICIOS

Además, este programa de inserción aporta una trabajadora social como coordinadora, cuatro auxiliares de clínica, dos monitores ocupacionales y una quiromasajista. "Esto está permitiendo que nos estemos superando en el servicio, al aportar otros complementos que están teniendo una gran acogida", concluyó.