La Dirección General de Salud Pública del Servicio Extremeño de Salud (SES) afirmó ayer mediante una nota de prensa que lo ocurrido en las Vegas Bajas no es un problema de salud pública, sino de calidad en el agua. Asimismo aclaró que los parámetros que presentó el agua captada del fondo tras conocerse la avería, no alcanzó "niveles peligrosos para la salud de las personas".