Cerca de 5.000 personas --4.500 mayores que viven solos y 450 dependientes-- pueden mantener el servicios de teleasistencia domiciliaria en los pueblos de menos de 20.000 habitantes de la provincia, gracias a los convenios que firmaron ayer el presidente de la diputación, Valentín Cortés; el consejero de Salud y Política Social, Luis Alfonso Hernández Carrón; y la directora del Sepad, Cristina Herrera, con asistencia de la diputada de Bienestar Social, Margarita Pérez.

Lo que hacen la consejería y el Sepad es asumir el coste del servicio que antes prestaba con la diputación el Ministerio de Servicios Sociales, que ha retirado su aportación. Cortés y Carrón señalaron la importancia de mantener este servicio en el ámbito rural para que personas mayores y dependientes puedan seguir en sus hogares y mantener la población en los pequeños municipios, pues de otro modo tendrían que salir de sus casas, de su entorno y de sus pueblos.

"Es en el mundo rural donde este servicio cobra virtualidad", afirmó el consejero, y por eso lo asume con la diputación de modo que se mantenga sin interrupción. La selección de los usuarios la hace la diputación con los servicios sociales de los ayuntamientos, en el caso del convenio de no dependientes, pues en el de dependientes son seleccionadas por el Sepad

El convenio nuevo contempla la aportación del 65% del importe total, cercano a los 700.000 euros, por el Sepad, y el 35% por la diputación, mientras que el coste del ya existente lo asume íntegro el Sepad, 102.300 euros.

Cortés recordó que la Diputación de Badajoz fue pionera al implantar este servicio en el año 2000, en las poblaciones menores de 20.000 habitantes. Y señaló que "el principal objetivo de la teleasistencia es coincidente con los intereses que siempre ha defendido esta institución: mantener la población en su entorno habitual y evitar el despoblamiento, al tiempo que proporcionamos protección a las personas que socialmente más lo necesitan".