Unos 400 vecinos de Hervás y la comarca rememorarán del 7 al 10 de julio las raíces judías de la localidad cacereña en la novena edición de Conversos . La ambientación del Barrio Judío y la representación de la obra de Solly Wolodarsky, La Conversa de Hervás , centran estas jornadas que, según manifestó ayer el director de Promoción Cultural de la Junta, José María Corrales, hacen que "las calles se conviertan en un museo etnográfico de primera magnitud".

Corrales presentó ayer en Cáceres esta fiesta popular --que recrea los acontecimientos vividos en la localidad en las postrimerías del siglo XV y principios del XVI-- acompañado por la diputada de Cultura, Silvia González, el alcalde de Hervás, Enrique Ribes, y el director de La Conversa de Hervás , Miguel Nieto. Todos coincidieron al destacar la importancia de la implicación de los vecinos en esta recreación, en la que más de 300 se convierten en artesanos, comerciantes o músicos para ambientar el Barrio Judío y otro centenar participa en la obra teatral que, por segundo año consecutivo, se representará en la calle del Vado, aprovechando así el escenario incomparable que brinda el patrimonio judío de la localidad.

Conversos rinde homenaje a la convivencia tolerante y respetuosa que cristianos y judíos protagonizaron en Hervás antes y después del Edicto de Expulsión de los Reyes Católicos, circunstancia que todos señalaron dota de "actualidad" a la fiesta.

Por su parte, Nieto afirmó que apenas se han introducido cambios en el montaje, aunque sí destacó que el espectáculo se ha consolidado y ha ganado en profundidad. El 7 de julio habrá un ensayo general de La Conversa de Hervás , que se representará el 8, 9 y 10 a las 22.30 horas. La ambientación del Barrio Judío, organizada por la Asociación de Amas de Casa y Consumidores Valdeamor, comenzará todos los días a las 19 horas.