La XXV Feria Agroganadera de Trujillo ha cerrado sus puertas con las expectativas defraudadas en las subastas de ganado ovino y bovino, en las que de los 816 animales expuestos a la venta, finalmente han sido adjudicados 205, mientras que 545 han quedado desiertos y 66 han sido retirados.En opinión del presidente del Comité Ejecutivo del certamen, Aurelio Gutiérrez Broncazo, "hay que trabajar para que, aunque existan ajustes del censo motivados por el chequeo médico de las PAC, esto no afecte a la cabaña ganadera extremeña", informa Efe."La calidad es los que nos va a mantener en el mercado", ha afirmado Gutiérrez Broncano, quien ha insistido en que "desde la feria vamos a trabajar por un sector que ha sido y debe seguir siendo de especial importancia en nuestra comunidad".Ha añadido que, para próximas ediciones, se estudiará la posibilidad de conceder ayudas a los ganaderos para incentivar la participación en la subasta. "Hablaremos de ello con todos los agentes implicados para que las subastas sean un éxito en las ediciones venideras", ha subrayado el presidente del Comité Ejecutivo, quien, no obstante, ha calificado de excelente el ganado que ha asistido a la feria, pues era "ejemplares de la mejor calidad".En relación a la afluencia de ganado ha dicho que ha sido "aceptable", dentro de las previsiones. Por sectores, en ovino se han subastado 703 cabezas, de las que 147 ha sido adjudicadas, 496 han quedado desiertas y 60 se han retirado. En bovino han pasado a subasta 113 cabezas, 58 se han adjudicado, 49 han quedado desiertas y 6 han sido retiradas. El remate de bovino ha quedado en 83.740 euros y el de ovino en 35.240 euros.