La Agrupación de Desarrollo de las Sierras del Norte de Extremadura, Adesne, ha presentado un proyecto Life a la Unión Europea para poner en marcha una mini planta piloto para la fabricación de pellets a partir de la manipulación y transformación de biomasa local y utilizarlos en el uso de la calefacción.

El vicepresidente de la asociación, José González de Cáceres, confirmó a EL PERIODICO que el proyecto cuenta con el apoyo de la Consejería de Desarrollo Rural y la Dirección General de Energía y Minas. La iniciativa contempla la utilización --con carácter demostrativo-- de los pellets como materia prima en la calefacción de edificios públicos (colegios, piscinas, polideportivos) y en viviendas de promoción pública. Los pellets de madera son unas pequeñas piezas cilíndricas prensadas, formadas por restos forestales o naturales como astillas o virutas.

"Queremos hacer un estudio de viabilidad para recoger todos los residuos y subproductos agrícolas de la poda de los cerezos y olivos para llevarlos hasta la planta de biomasa", explicó González. Tanto la consejería como la dirección general ven "viable la iniciativa" y la puesta en marcha de esta pequeña planta piloto rondaría "los 600.000 euros", afirmó el vicepresidente. Adesne pretende demostrar con esta idea la viabilidad de la fabricación de pellets para que se "animen las iniciativas privadas y sirva para crear puestos de trabajo". La agrupación de desarrollo se ha marcado varias fases dentro del planteamiento Life , como es una campaña de sensibilización sobre el uso de la biomasa como combustible y la investigación sobre el aprovechamiento energético de estos residuos.