La Asociación para el Desarrollo Integral de La Vera (Adicover) ha aprobado un proyecto de la Unión de Pequeños Agricultores-Unión de Campesinos Extremeños (Upa-Uce), que está dotado con 20.000 euros (3,3 millones de pesetas), para potenciar la cabra verata, que se encuentra en un periodo de auténtica regresión en toda la zona, según los datos que maneja Jesús Jiménez del Río, miembro de la ejecutiva regional de la citada organización agraria.

En este sentido indicó que "ya en su día sensibilizamos a la Junta de Extremadura para que aprobara un decreto encaminado a que la cabra verata autóctona tenga una ayuda económica, que venga a sumarse a la que recibe vía PAC. Pero en estos momentos es necesario promocionar el sector caprino", aseguró.

Para ello Upa-Uce presentó a la convocatoria de la iniciativa europea Proder un proyecto dirigido a la potenciación del cabrito verato, "que nos ha sido aprobado ahora --añadió Jiménez del Río--, y que contempla la realización de un concurso de recetas de cocina, cuyo ingrediente principal sea la exquisita carne que proporcionan estos animales".

UN LIBRO DE RECETAS

Las recetas que participen en el concurso serán recopiladas en un libro, "que sin duda va a ser importante para que los restaurantes y las amas de casa puedan utilizar estas recetas tradicionales a la hora de preparar sus platos preferidos de cabrito".

Posteriormente, se llevarán a cabo unas jornadas sobre caprino, durante las cuáles será redactado un documento que recogerá la protección de esta típica raza de cabras, fácilmente reconocibles por su cornamenta, "con el objetivo principal de que continue aumentando el número de reses, consolidado por el decreto de la Junta", publicado en el mes de abril de este mismo año.

Por otro lado, Jiménez del Río, destacó "lo beneficioso" que puede resultar el aumento de la cabaña caprina en la comarca de La Vera, "no solo en el apartado económico directo, sino en el medioambiental, ya que al haber más carga ganadera" en las sierras del entorno, el pasto y las escobas disminuyen en tamaño, "reduciendo proporcionalmente el peligro de incendios, principalmente en la época estival, en la que nos encontramos, por desgracia, con fuegos casi de forma diaria", subrayó Jiménez.