Las diputaciones no son necesarias, sino imprescindibles". Así de rotundo se mostró ayer el alcalde de Coria, José Manuel García Ballestero, durante una intervención en la sede del PP local junto al portavoz del grupo en la Diputación de Cáceres, Alfredo Aguilera, y otros diputados. El alcalde, que por la tarde participó en Coria de una reunión de trabajo con miembros del partido que además visitaron el Parque de Bomberos dependiente de diputación, arremetió contra los que apuestan por eliminar las instituciones provinciales, una medida anunciada por PSOE y Ciudadanos a nivel nacional. "Aquellos que quieren hacer desaparecer las diputaciones no saben qué son, qué competencias tienen, y no conocen el mundo rural", afirmó.
Ballestero Recalcó, además, que gracias a la Diputación de Cáceres, durante el pasado año los caurienses se pudieron beneficiar de inversiones destinadas a diversos proyectos. Como ejemplos citó la reforma integral de la plaza de la Paz y la sustitución del antiguo empedrado por uno más accesible y moderno en las calles del casco histórico.
MEJORA DE ACCESOS Respecto al presente y a un futuro más inmediato, el alcalde también recordó que de la Diputación de Cáceres depende otro proyecto importante para Coria: una inversión de 1 millón que está previsto destinar a la mejora de los accesos a la localidad, tanto por la antigua carretera del Guijo como por la de Montehermoso. Un proyecto que, según detalló el alcalde, "sigue en proceso de tramitación y avanzando".
A ello habría que sumar el plan previsto por la diputación para municipios de más de 10.000 habitantes, entre los que se incluye Coria. Además, Ballestero recordó que los numerosos pueblos de la provincia con menos de 1.000 habitantes se sustentan "gracias a la diputación", así como muchos servicios que se prestan en beneficio de la calidad de vida de los ciudadanos.
Por su parte, Alfredo Aguilera ratificó las declaraciones de Ballestero y lamentó que este debate "tan ligero", dijo, sobre la eliminación de las diputaciones, "esté generando mucha incertidumbre entre los más de 1.200 trabajadores que dependen de la diputación cacereña".
