El Ayuntamiento de Coria continúa sus contactos con la Junta de Extremadura con el fin de «agilizar», según confirmó el alcalde, José Manuel García Ballestero, el último informe que está pendiente de gestionarse por parte de la Administración regional para conseguir la aprobación definitiva en la Comisión Regional de Urbanismo del Plan General Municipal (PGM). Precisamente, el alcalde cauriense, en esta semana, se ha trasladado hasta Mérida donde ha mantenido una reunión con la Directora General de Urbanismo con el fin de impulsar esta última gestión.

El pasado mes de febrero, fue cuando el ayuntamiento presentó el proyecto del Plan ante el departamento de la Dirección General de Urbanismo de la Junta, con el fin de alcanzar su aprobación definitiva. Una resolución para la cual la administración regional tendría que resolver en unos meses. «Es un momento importante para que Coria se adapte a los tiempos en que vivimos, ya que ahora cuenta con unas normas subsidiarias de 1989, de ahí la importancia de adaptar la localidad a las necesidades urbanísticas que exige la ley», afirmó el alcalde tras aportar la documentación. Asimismo, recordó que el proyecto del PGM se aprobó de manera inicial en junio del 2014 tras redactarse en el 2012. Después se aprobó de manera provisional en septiembre del 2017 y la aprobación definitiva le corresponde ahora a la Junta.

García Ballestero recalcó que el PGM «es la base imprescindible del desarrollo de la localidad, ya que sin tener una herramienta urbanística y adaptada a las necesidades de los ciudadanos, ningún municipio puede desarrollarse con garantías».

Además, añadió que el ayuntamiento, dentro de sus competencias, ya aprobó inicial y provisionalmente el Plan y que por su parte se han realizado todos los trámites necesarios y que ahora depende de la Junta. Finalmente, insistió en que el Plan «es una necesidad ya que el suelo en la localidad cauriense está agotado y hay muchas dificultades para desarrollar proyectos empresariales». Además, aseguró que, en la actualidad, «hay inversiones e inversores esperando en la ciudad a que se libere suelo».