Como viene siendo habitual en los últimos meses, José Antonio Redondo, alcalde de la ciudad, ha comparecido esta semana ante los medios de comunicación para dar cuenta de la situación actual de Trujillo frente al coronavirus.

Así, ayer realizó un repaso por las medidas más significativas que se están llevando a cabo a través del consistorio para alcanzar la tan ansiada normalidad y comentó las cuestiones de mayor relevancia para el desarrollo del municipio.

Entre ellas destacó que «lamentablemente» se han agotado los fondos dedicados al pago de los mínimos vitales. «Otros años, hemos podido devolver parte de esta cuantía. En esta ocasión, se ha acabado la partida», comentaba el alcalde que, del mismo modo, quiso tranquilizar matizando que se destinará lo que sea necesario para este asunto a través de modificaciones en el presupuesto, algo que el equipo de gobierno ya había contemplado.

«No vamos a permitir la indigencia», sentenció Redondo, que cree que serán necesarios unos 40.000 euros más para poder hacer frente a los pagos relativos a la luz, el agua, el gas y los alimentos de las personas que tengan estas necesidades.

Asimismo, el edil reconoció en su intervención que ya habían barajado la posibilidad de que estos fondos se pudieran agotar debido a la situación de crisis actual, por eso, «se ha dotado de suficiente flexibilidad al presupuesto municipal», resaltó.