El Ayuntamiento de Casar de Palomero espera tener finalizado el estudio de las más de 200 alegaciones presentadas al plan de urbanismo de la localidad el próximo mes de enero. El plazo de presentación de alegaciones se cerró el pasado 15 de noviembre, después de cinco meses de exposición pública.

La aprobación inicial del plan generó un polémico debate entre los vecinos del municipio que incluso crearon una plataforma denominada Asociación Abusos Urbanísticos No en Extremadura (Aunext) que ha mostrado en varias ocasiones, a través de actos públicos y convocatorias de prensa, su oposición al desarrollo de este plan urbanístico. El alcalde de Casar de Palomero, Eduardo Béjar, confirmó que la semana pasada ya se celebraron las primeras reuniones con el técnico redactor del proyecto para estudiar las alegaciones. Estas reuniones de trabajo se prolongarán en las próximas semanas y posteriormente será necesario que el plan pase por el pleno. El equipo técnico decidirá en estos encuentros qué modificaciones al proyecto de urbanismo se aceptarán y cuales se rechazarán. Béjar recordó que la última palabra en materia de urbanismo la tiene la Agencia Extremeña de la Vivienda. "La competencia es de la Junta de Extremadura y puede decidir sobre una alegación", manifestó.

Béjar señaló que "lo ideal sería que estuviera todo estudiado en enero". Una vez que se introduzcan las modificaciones pertinentes, el nuevo documento deberá someterse de nuevo a pleno y una vez que se apruebe inicialmente, volverá a exponerse a información a pública. Ante la polémica suscitada por la creación de Aunext y la oposición de los vecinos al plan, el presidente de la Agencia de la Vivienda, Javier Corominas, acudió en noviembre a la localidad para explicar a los vecinos la finalidad del plan de urbanismo.