Pensar en La Vera, en verano, es pensar en agua cristalina, pura y fría. Pues lo mismo ocurre sin pensamos en Collado de la Vera, en sus gargantas y, sobre todo, en ‘Las Pilas’, un paraje único y tranquilo. Pero no es solo agua, también hay otros elementos y rincones que hacen de la localidad un municipio con un encanto especial.

Sin duda, ‘Las Pilas’ es un lugar de refugio para los vecinos y vecinas de Collado de la Vera, donde pasar mejor las horas de calor dándose un chapuzón.

Pero, además, desde hace unos años, el ayuntamiento instala paraguas de colores en la plaza de la localidad, durante todo el verano, «como una medida más para atraer visitantes a Collado», señala Montse. Eso sí, cuando llegan las fiestas de la Virgen del Rosario, se cambian a los colores azul y blanco en su honor.

Pinturas representativas

Así mismo, otra forma de atraer a visitantes es la realización de murales, en fachadas, «que recrean las tradiciones y costumbres de Collado de la Vera, como la señora que venía del horno con su pan recién hecho o el señor forrando una botella con esparto». Incluso, se están elaborando otros murales con la flora autóctona de la zona. «También hay murales dedicados a las mujeres y en uno de ellos se puede ver a Clara Campoamor. Yo invito a todos a que vengan hasta Collado de la Vera para disfrutar de nuestras tradiciones y costumbres y que visiten todos los encantos que tenemos», subraya la alcaldesa.

Igualmente, «y con mucha pena», este año se han tenido que suspender las fiestas de San Cristóbal, «una decisión difícil, pero que los vecinos han comprendido». Para las fiestas de la Virgen del Rosario, a primeros de octubre, “»o organizaremos todo, pero no sabemos si las podremos celebrar, porque sigue habiendo riesgo, aunque la afluencia de gente sería menor, pero será difícil», sentencia Montse Fernández.