El Juzgado de lo Penal número 2 de Cáceres ha condenado hoy a cuatro meses de prisión a un vecino de Piedras Albas por un delito de maltrato animal, en concreto a una perra de raza bóxer en estado de abandono, tras llegar a un acuerdo la Fiscalía, que solicitaba nueve meses, y la defensa del acusado.

Además, se le condena a un año y un mes de inhabilitación especial para el ejercicio de cualquier profesión, oficio o comercio que tenga relación con la tenencia, custodia o compraventa de animales domésticos.

Según el letrado encargado de la defensa, Jacinto Cuño, aun sabiendo que su cliente es "absolutamente inocente" y que "no ha maltratado en ningún momento al animal", que tiene una "enfermedad" que le ha llevado a la extrema delgadez, han llegado a un acuerdo con el Ministerio Fiscal para evitar el juicio.

Ha asegurado también que finalmente la asociación El Refugio, que pedía como acusación particular un año de cárcel y tres años de inhabilitación para el acusado, no ha sido admitida como parte en este caso por no presentarse como acusación popular.

Ignacio Paunero, presidente de la organización, que fue la que rescató al animal, ha valorado la condena, que "es siempre bienvenida".

"En los 22 años que llevo en protección animal jamás he visto una perra en ese estado, con garrapatas, heridas por todo el cuerpo y desnutrida, unas condiciones terroríficas", ha afirmado Paunero, quien se ha mostrado "contento" por la posterior recuperación del animal.

Los hechos sucedieron en mayo de 2016, cuando el Seprona incautó en Valencia de Alcántara (Cáceres) una perra bajo la custodia del acusado en "grave estado de salud", tras lo cual el Ayuntamiento de Piedras Albas pidió ayuda a la asociación española El Refugio.

La protectora se hizo cargo de la recuperación de la perra Tanita y de buscarle una casa de adopción en Madrid, donde se encuentra recuperada.

Según la asociación, el animal estaba sin identificar, ni vacunar y sin ningún tipo de cuidado veterinario, muy por debajo de su peso, un estado de abandono que le "hubiera producido la muerte".

El Refugio tiene abiertos cerca de cien procedimientos penales en el país por maltrato animal, entre ellos el de un cazador en Madrid, para el que han pedido cuarenta años de cárcel por haber maltratado presuntamente a 55 perros.