Parece que los problemas de Cruz Roja empiezan a solucionarse. Según su presidente, Eduardo Juliench, han encontrado un local que si bien no es muy amplio si está en condiciones para ser ocupado. De momento no se quiere desvelar su emplazamiento hasta que concluyan las negociaciones con la agencia inmobiliaria, pero si se sabe que está cerca de la actual sede, en la calle Castúo. La anterior se abandonó por el mal estado en el que se encontraba.

Se trata de un local diáfano, de 160 metros cuadrados que habrá que tabicar y dotar de la infraestructura y medios necesarios. Juliench destacó las cordiales relaciones que existen con el ayuntamiento, que se encargará de acondicionar la instalación.

Una vez listo se trasaladará allí la oficina de atención al inmigrante que ahora está en la travesía Weyler y se levantará un aula para impartir los cursos de garantía salarial y que de momento se están impartiendo en el centro de adultos.

Por otra parte, Juliench instó a los socios a que se pasen por la sede o llamen al teléfono 927 53 11 08 para actualizar sus datos y cuotas, ya que "con la precaria situación económica por la que atraviesa la asociación es vital cualquier aportación para nuestra subsistencia", afirmó. También animó a los jóvenes a que se unan a la banda de cornetas y tambores para participar en el desfile de estos carnavales.

DIMISION EN TALAYUELA

Y si los problemas de Navalmoral parecen empezar a solucionarse no corre la misma suerte Talayuela. Según han informado fuentes municipales hace días se produjo la dimisión de su presidente alegando motivos personales.